Lánzate y desarrolla tus alas en el camino.
Por Carolyn Lizardo
Te pregunto, ¿Qué te frena? ¿Qué te ha estado deteniendo para tomar la decisión de abrir tu negocio, de lanzar tu idea, de ser o hacer lo que siempre has querido? ¿Qué es aquello que siempre detiene o corta tu imaginación y los deseos por cambiar tu vida? ¿Es el miedo al qué dirán? ¿Es miedo a perder lo que tienes ahora en tu vida? ¿Materiales, status social o hasta personas en tu vida? ¿Es miedo al fracaso?
Quiero que pienses en las respuestas, y veas que todas son meras excusas, que nada más son obstáculos mentales que tú mismo has decidido creer. En la Palabra de Dios, en Marcos capítulo 9 cuenta la historia de un endemoniado que los discípulos no pudieron liberar de un demonio que lo atormentaba, y quiero que vayamos directo al encuentro entre el padre del endemoniado y Jesús.
Esta conversación es poderosa porque lo que Jesús le contesta al padre es lo que quiero decirte en este dia a ti hoy. Un padre desesperado por la liberación de su hijo le dice al autor de la vida, a nuestro Señor y Salvador, «pero si puedes hacer algo» (Marcos 9:22b). El famoso «pero» es nuestro enemigo a la hora de querer emprender en algo, o lanzarnos a un nuevo comienzo, o crecimiento en nuestras vidas. Ese «pero» que tanto usamos es la señal de nuestra incredulidad, es la muestra de la barrera que nos estamos poniendo frente a nuestro éxito, de que tengo miedo, tengo dudas, estoy inseguro (a). Hoy le pondremos fin a las dudas, al miedo, a la inseguridad en el nombre de Jesús.
Pues, así como Jesús le contestó a este padre en medio de su situación te digo: «Si puedes creer, al que cree todo le es posible» (Marcos 9:23). Así, que empieza a creer en ti, a creer en las habilidades que tienes y las que estás por descubrir, cree en lo que Dios dice de ti. Lánzate, aun con miedo, lánzate, aun con inseguridades, lánzate, aun con dudas, lánzate, aunque no estés listo, lánzate. Y desarrolla tus alas en el camino, crece y perfeccionate en el camino. Los comienzos nunca son perfectos o los mejores, pero deberás comenzar para llegar a ser el mejor en aquello que te decidas a emprender.
Grábate estas palabras de Jesús, «Si puedes creer, al que cree todo le es posible» (Marcos 9:23). y lánzate y desarrolla tus alas en el camino.
«Si lo crees, entonces es posible.»